Foto:
Según Deanna Stirling, enfermera de salud pública de la Unidad de Salud de Middlesex-Londres (Ontario), las contracciones «de práctica» (que, a diferencia de las reales, no dilatan el cuello uterino) pueden aliviarse con estas medidas:
1. Aplica calor
¡Estás embarazada!
Inscríbete para recibir actualizaciones semanales por correo electrónico sobre tu bebé » A menudo, las contracciones previas al parto desaparecen si te das un baño caliente o te acurrucas con una bolsa de agua caliente envuelta en una toalla.
2. Tómate un descanso
Las contracciones de Braxton-Hicks pueden indicar que estás haciendo demasiado; el descanso puede aliviarte.
Publicidad
3. Bebe agua
La deshidratación leve puede desencadenar calambres, así que bebe. (Pero no te olvides de orinar. Una vejiga llena puede irritar el útero, aumentando así la intensidad de los Braxton-Hicks.)
4. Practica la respiración profunda
Los Braxton-Hicks ofrecen una oportunidad perfecta para practicar tus estrategias para afrontar el parto.
¿Y cómo saber si esos calambres son Braxton-Hicks o un auténtico parto? «Con el trabajo de parto verdadero, cosas como un baño caliente o el descanso no cambiarán las contracciones; simplemente se harán más fuertes», dice Stirling. Si sigues teniendo dudas, consulta a tu cuidador.
4 consejos para controlar el miedo al parto
Guía para controlar el dolor del parto
Elegir una comadrona o un médico