Los condensados de fuego procedentes de la vegetación y de las quemas domésticas se producen de forma ubicua en el medio ambiente. Hasta ahora, sin embargo, era difícil estimar su origen y cualquier relación con el carbono pirogénico depositado como carbón vegetal. Nuestro objetivo era: (i) diferenciar la composición química de los condensados del fuego de las partículas de carbón vegetal, y (ii) relacionar esto con los orígenes del combustible de hierba, madera blanda o madera dura. Analizamos la composición isotópica δ13C y δ15N, los fenoles derivados de la lignina, los ácidos policarboxílicos bencénicos (BPCA) y los hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH), en carbones y condensados producidos en laboratorio a temperaturas de combustión de 300, 350, 400, 450, 500 y 600 °C. Encontramos que la composición de BPCA y PAH de los condensados difería significativamente de la de los carbones. Los condensados presentaban mayores porciones de ácidos penta- a hexacarboxílicos de benceno (B5CA a B6CA), fenantreno (p < 0,01) y HAP de cuatro anillos (fluoranteno, pireno, criseno y benzantraceno, p < 0,01). Las proporciones de HAP del indenopireno con respecto al benzoperileno (IP/(IP + BP) y del fluoranteno con respecto al pireno (Flua/(Flua + Py) fueron de diagnóstico para los condensados, pero independientes del tipo de combustible. La composición de los isómeros de 1,2-, 1,7- y 2,6|3,5 dimetilfenantrenos (DMP) era específica del combustible, con la relación de los isómeros de (1,7 + 2,6|3,5)/(1,2 + 1,7 + 2,6|3,5) separando la madera dura (0.2-0,6), de la hierba (0,6-0,9), y de la madera blanda (<0,9), permitiendo así la identificación de las fuentes de combustible de condensado y de carbón vegetal.