¿Qué es la adolescencia?

La adolescencia es el periodo de transición entre la infancia y la edad adulta. Los niños que entran en la adolescencia experimentan muchos cambios (físicos, intelectuales, de personalidad y de desarrollo social). La adolescencia comienza con la pubertad, que ahora se produce antes, por término medio, que en el pasado. El final de la adolescencia está ligado a factores sociales y emocionales y puede ser algo ambiguo.

¿Cuáles son los cambios físicos de la adolescencia?

Hay tres cambios físicos principales que vienen con la adolescencia:

  • El estirón (un signo temprano de maduración);
  • Caracteres sexuales primarios (cambios en los órganos directamente relacionados con la reproducción);
  • Caracteres sexuales secundarios (signos corporales de madurez sexual que no implican directamente a los órganos reproductores)

¿Cuáles son los cambios intelectuales de la adolescencia?

El pensamiento del adolescente está en un nivel superior al de los niños. Los niños sólo son capaces de pensar lógicamente en lo concreto, en el aquí y ahora. Los adolescentes van más allá de estos límites y pueden pensar en términos de lo que podría ser cierto, en lugar de sólo lo que ven que es cierto. Son capaces de tratar con abstracciones, probar hipótesis y ver infinitas posibilidades. Sin embargo, los adolescentes siguen mostrando a menudo comportamientos y actitudes egocéntricos.

¿Cuáles son los cambios sociales y emocionales de la adolescencia?

Los adolescentes también se desarrollan social y emocionalmente durante esta época. La tarea más importante de la adolescencia es la búsqueda de la identidad. (A menudo se trata de un viaje que dura toda la vida y que se inicia en la adolescencia.) Junto con la búsqueda de la identidad viene la lucha por la independencia.

¿Cómo pueden los padres apoyar el desarrollo saludable de los adolescentes?

Aunque la adolescencia puede ser un período difícil tanto para los jóvenes como para sus padres, el hogar no tiene por qué convertirse en un campo de batalla si tanto los padres como los jóvenes hacen esfuerzos especiales para entenderse. Las siguientes pautas pueden ayudar a los padres:

  • Da a tus hijos toda tu atención cuando quieran hablar. No lea, ni vea la televisión, ni se ocupe de otras tareas.
  • Escuche con calma y concéntrese en escuchar y comprender el punto de vista de sus hijos.
  • Hable a sus hijos de forma tan cortés y agradable como lo haría con un extraño. Su tono de voz puede marcar el tono de una conversación.
  • Comprenda los sentimientos de sus hijos, aunque no siempre apruebe su comportamiento. Intente no hacer juicios de valor. Mantenga la puerta abierta sobre cualquier tema. Sea un padre «abierto/accesible».
  • Evite humillar a sus hijos y reírse de lo que a usted le puede parecer preguntas y afirmaciones ingenuas o tontas.
  • Anime a sus hijos a «probar» nuevas ideas en la conversación no juzgando sus ideas y opiniones, sino escuchando y luego ofreciendo sus propios puntos de vista de la manera más clara y honesta posible. El amor y el respeto mutuo pueden coexistir con puntos de vista diferentes.
  • Ayude a sus hijos a desarrollar la confianza en sí mismos fomentando su participación en actividades de su elección (no la suya).
  • Esfuércese por elogiar a sus hijos con frecuencia y de forma adecuada. Con demasiada frecuencia, damos por sentado las cosas buenas y nos centramos en las malas, pero todo el mundo necesita ser apreciado.
  • Anime a sus hijos a participar en la toma de decisiones de la familia y a resolver los problemas familiares junto con usted. Comprenda que sus hijos necesitan desafiar sus opiniones y sus formas de hacer las cosas para lograr la separación de usted que es esencial para su propia identidad adulta.

¿Qué pueden hacer los adolescentes durante este tiempo?

  • Evite mirar a sus padres como el enemigo. Lo más probable es que te quieran y tengan en cuenta tus mejores intereses, aunque no estés necesariamente de acuerdo con su forma de demostrarlo.
  • Trata de entender que tus padres son seres humanos, con sus propias inseguridades, necesidades y sentimientos.
  • Escucha a tus padres con la mente abierta, y trata de ver las situaciones desde su punto de vista.
  • Comparte tus sentimientos con tus padres para que puedan entenderte mejor.
  • Cumple con tus responsabilidades en casa y en la escuela para que tus padres se sientan más inclinados a concederte el tipo de independencia que deseas y necesitas.
  • Reforza tus críticas a la familia, la escuela y el gobierno con sugerencias de mejoras prácticas.
  • Sé tan cortés y considerado con tus propios padres como lo serías con los padres de tus amigos.

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