Como instructor de artes marciales o propietario de un negocio de artes marciales sabrá la alegría que tienen los niños mientras aprenden y practican un arte marcial. Sin embargo, hay una gran cantidad de razones por las que los niños deberían aprender un arte marcial y puede compartirlas con los padres para animarles a que inscriban a sus hijos y empiecen a cosechar los beneficios
Autodisciplina
Las artes marciales ayudarán a enseñar a los niños el arte de la autodisciplina. Con demasiada frecuencia, los niños de hoy en día están acostumbrados a conseguir lo que quieren cuando quieren. Las artes marciales enseñan contención y paciencia.
Activarse
Aleja a los niños de sus pantallas y del sofá y les anima a ser más activos físicamente al mismo tiempo que se divierten. Aprender un arte marcial es un ejercicio completo, no sólo para el cuerpo sino también para la mente.
Establecimiento de objetivos
Tener una competición o un torneo al que los niños puedan aspirar les ayuda a establecer objetivos en la vida y, tanto si ganan como si no, les ayuda a enfrentarse a cualquier resultado, lo que será beneficioso en la vida posterior.
Respeto
A veces, en los tiempos que corren, a los niños les cuesta respetar a las figuras de autoridad; sin embargo, las artes marciales enseñan a los niños a respetar a su instructor y a los demás mientras aprenden el arte.
Escuchar
Escuchar es la clave en las artes marciales, ya que si no escuchan al instructor no podrán completar el movimiento correctamente. Se enseña a escuchar tanto de forma individual como en grupo y la demostración de estas habilidades permite a los niños progresar a través de los cinturones.
Aumenta la autoestima y la confianza
Cuando un niño domina una nueva habilidad o movimiento aumentará su confianza y le dará un verdadero sentido de logro. El hecho de ir subiendo de categoría también demuestra que el trabajo duro tiene su recompensa y que tienen algo en lo que confiar.
Trabajo en equipo
A menudo, en las clases de práctica se trabaja en parejas para practicar y aprender nuevas habilidades y movimientos. Esto no sólo les enseña a respetar a los otros niños, sino a trabajar juntos para lograr su objetivo mutuo. Pronto aprenderán que a veces dos cabezas piensan mejor que una!
Resolución de conflictos
Una idea errónea de las artes marciales es que promueven el comportamiento violento, pero en realidad es todo lo contrario. Las artes marciales enseñan a los niños habilidades pacíficas y no violentas para la resolución de conflictos y hacen hincapié en que deben evitarse los altercados físicos.
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