Todos los padres han pasado por eso alguna vez. Su hijo se siente muy bien durante todo el día, sólo para tener un pico de fiebre durante la noche, despertando sintiéndose muy bien y listo para conquistar el día. Lo envías al colegio (quizás con un poco de medicina de antemano), sólo para que este mismo escenario se repita una y otra vez.

O tu hijo está enfermo con fiebre, pero se le quita a primera hora de la tarde, y se siente muy bien. Usted tiene varias reuniones de trabajo al día siguiente y está deseando que su hijo vuelva al colegio. Su fiebre ha desaparecido, se siente muy bien, así que los envía a su camino.

Desgraciadamente, hay razones válidas para mantener a su hijo en casa de la escuela durante 24 horas completas después de que su fiebre se rompe.

La Dra. Katie (de Forever Freckled) es una pediatra, madre y bloguera. En un reciente evento de Facebook Live, explicó por qué es tan importante mantenerse fiel a esta regla de 24 horas (sí, incluso si tu hijo se siente muy bien).

  1. No quieres que otros niños se enfermen, y tu hijo todavía puede ser contagioso dentro de las 24 horas de la fiebre. Aunque todos sabemos que ésta es la mejor práctica, no siempre es suficiente motivación para mantener a los niños en casa sin ir al colegio, especialmente si se sienten bien o si tenemos que volver al trabajo. Es importante tener en cuenta esta regla de 24 horas.
  2. Es más probable que su hijo se contagie de otra cosa. A las 24 horas de la fiebre, el sistema inmunitario de tu hijo está debilitado y es mucho más probable que coja otra cosa. Por eso puede parecer que su hijo está mejor durante un par de días, para luego volver a enfermar. Se ha contagiado de otra cosa. También es la razón por la que a veces los síntomas de su hijo pueden pasar de un dolor de garganta a vómitos en pocos días. Han cogido otra cosa.
  3. El descanso y la recuperación son cruciales para sentirse mejor. Incluso si se sienten bien, el descanso y la recuperación adicionales son fundamentales para ayudar a su hijo a superar completamente una enfermedad. No querrá que se contagie de otra cosa o que recaiga en lo que ya tiene.

Incluso si su hijo se siente mejor, asegúrese de que no vaya a la escuela durante 24 horas después de la fiebre. No sólo ayudará a evitar que esos gérmenes se propaguen a otros niños, sino que también puede ayudar a mantener a su hijo a salvo de los gérmenes. Como siempre, si tiene alguna duda o pregunta, asegúrese de llamar a su pediatra.

Puede ver nuestra entrevista completa con la Dra. Katie a continuación, o hacer clic aquí para verla en Facebook.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.