Una llave de coche o de automóvil es una llave utilizada para abrir y/o arrancar un automóvil. Los diseños modernos de las llaves suelen ser simétricos y algunos utilizan ranuras en ambos lados, en lugar de un borde cortado, para accionar la cerradura. Tiene múltiples usos para el automóvil con el que se vendió. Una llave de coche puede abrir las puertas, así como poner en marcha el encendido, abrir la guantera y también abrir el maletero (boot) del coche. Algunos coches vienen con una llave adicional conocida como llave de aparcacoches que arranca el encendido y abre la puerta del lado del conductor, pero impide que el aparcacoches acceda a los objetos de valor que se encuentran en el maletero o la guantera. Algunas llaves de acceso, sobre todo las de vehículos de alto rendimiento, llegan a restringir la potencia del motor para evitar que el conductor se divierta. Recientemente, en los vehículos más nuevos se han implementado elementos como los inmovilizadores codificados. Los sistemas más sofisticados hacen que el encendido dependa de dispositivos electrónicos, en lugar del interruptor de llave mecánico. Se ha demostrado que algunos de estos sistemas, como KeeLoq y Megamos Crypto, son débiles y vulnerables a los ataques criptográficos.
Los interruptores o bloqueos de encendido se combinan con el bloqueo de seguridad de la columna de dirección (en muchos vehículos modernos) o de la palanca de cambios (como en los vehículos de Saab Automobile). En estos últimos, el interruptor se encuentra entre los asientos, lo que evita daños en la rodilla del conductor en caso de colisión.
Los sistemas de acceso sin llave, que utilizan un teclado montado en la puerta o un mando a distancia en lugar de la llave del coche, se han convertido en una característica estándar en la mayoría de los coches nuevos. Algunos de ellos son manos libres.
Algunas llaves de alta tecnología para automóviles se anuncian como elementos disuasorios de robos. Mercedes-Benz utiliza una llave que, en lugar de tener una pieza metálica cortada para arrancar el coche, utiliza un rayo infrarrojo codificado que se comunica con el ordenador del coche. Si los códigos coinciden, el coche puede arrancar. Estas llaves pueden ser caras de reemplazar si se pierden y pueden costar hasta 400 dólares.
Una llave switchblade es básicamente igual que cualquier otra llave de coche, excepto en su apariencia. La llave switchblade está diseñada para plegarse dentro del llavero cuando no se utiliza. Las llaves de palanca se han hecho muy populares recientemente debido a su aspecto elegante y compacto. Este tipo de llaves también se denominan comúnmente Flip Keys. Dado que las llaves de palanca sólo se desarrollan para los nuevos modelos de coche, suelen estar equipadas con un chip transpondedor programado.