¡Si te sobra caldo en el que no te has sumergido, úsalo para hacer risotto o pasta con marisco!
**Conservar las gambas en el caparazón les da más sabor, pero si quieres cocinar las gambas sin caparazón, pregunta a tu proveedor de gambas/pescadero si pueden desvenar y pelar las gambas por ti para ahorrar tiempo. O bien, déjelas con el caparazón y córtelas a lo largo de la parte trasera para eliminar la vena, pero mantenga el caparazón.
*Notas sobre la compra y la limpieza del marisco:
Comprando:
Generalmente las almejas, los mejillones y las ostras que se compran en el supermercado ya han sido purgados. Algo que siempre debe preguntar a su proveedor es si las almejas han sido purgadas.
Si no tienen el marisco que busca, pregunte por una buena alternativa.
¿Cuánto tiempo se mantienen frescas?
Pregunte a su pescadero al comprar pero siempre huela y observe antes de cocinar. Deben oler a agua salada y nunca demasiado a pescado. También deben tener un aspecto y una sensación de frescura, sin baba ni coloración. La nota general es que se mantienen frescos durante 1-2 días de la compra en la nevera a 40 grados F o menos.
Como las opciones de mariscos varían según el estado, aquí está mi fuente recomendada para obtener más información sobre los mariscos sostenibles: https://www.seafoodwatch.org/seafood-recommendations/consumer-guides
Preparing:
El marisco debe oler a fresco, con las conchas cerradas y sin romper. Si alguno está abierto, presione ligeramente o golpee las conchas. Si no se cierran o están agrietadas, deben desecharse.
No dude en llamar a su proveedor si tiene alguna pregunta o si hay demasiados mariscos muertos o agrietados.
Almejas:
Enjuague sus almejas bajo el chorro de agua fría para eliminar los sedimentos sueltos. Para purgarlas, transfiera sus almejas a un recipiente con agua fría con sal durante 20 minutos en el refrigerador. Déjalas al descubierto, ya que se asfixiarán si las envuelves con plástico. A continuación, saca las almejas del cuenco y pásalas a otro cuenco de agua salada durante otros 20 minutos en la nevera. Después del segundo remojo en agua salada y cuando esté listo para cocinar, saque el marisco del agua para que el sedimento quede en el fondo de la olla.
Para comer las almejas al vapor, abra la concha y retire la almeja cocida. Arranque la piel que cubre el sifón (la pequeña cosa que sobresale) de la almeja. Desecha esa piel y cómete todo lo demás. Algunas personas consideran que el sifón es algo duro y gomoso. Se puede comer o no, pero es un asidero muy cómodo para sumergir la almeja en el caldo caliente.
Mejillas:
Antes de cocinarlos, quítales la barba, el material fibroso que sobresale de un lado, tirando hacia la bisagra de la concha y hacia afuera. Se les da un rápido lavado con un cepillo de verduras bajo el chorro de agua fría.
Gambas:
Enjuagar las gambas en un colador bajo agua fría, no más caliente que la temperatura ambiente.