Las uñas de los pies. Son algo en lo que no solemos pensar muy a menudo. Pero si usted o alguien que conoce ha perdido alguna vez una después de convertirse en un corredor serio, es algo en lo que podría pensar mucho más. Para muchos corredores, perder las uñas de los pies es algo que ocurre. Las uñas de los pies suelen tardar unos seis meses en volver a crecer, y cuando lo hacen, la nueva uña es más gruesa que la anterior. Los corredores no piensan realmente en formas de evitar que esto ocurra.
Afortunadamente, hay cosas que puedes hacer para prevenir esta dolorosa y antiestética pérdida de la uña del pie.
¿Cómo pueden los corredores proteger las uñas de los pies?
Aquí tienes algunos consejos para cuidar las preciosas uñitas de los pies:
- Enfócate en tu calzado – La primera forma de evitar la pérdida de las uñas de los pies es asegurarte de que tienes el calzado adecuado. Debe haber la anchura de un pulgar entre la punta del dedo y la parte delantera de la zapatilla. Los médicos también recomiendan llevar dos pares de calcetines para tus carreras largas.
- Hidrata las uñas de los pies – Los médicos recomiendan que te pongas loción de urea en las uñas de los pies antes de ponerte las zapatillas de correr. Dicen que es el mejor tipo de hidratante del mercado. Los médicos también dicen que puedes probar el aceite de coco para humedecer la uña – y el aceite de árbol de té para combatir los hongos.
- Come sano – Cuando no comes alimentos nutritivos, puede hacer que tus uñas sean más débiles. Además, ¡tampoco te ayudará a correr!
- Mantén las uñas de los pies «cuadradas» – Cuando te haces la pedicura o te arreglas tú misma las uñas de los pies, tiendes a conseguir una uña con forma redonda. Eso no es lo que quieres si eres una corredora. Opta por la uña del pie con forma cuadrada.
- Atiende tus uñas lesionadas inmediatamente – Si te quitas las zapatillas y ves una uña asquerosa (es decir, negra y azul), debes atenderla. Rápidamente. Hay que limpiar las uñas de los pies y tratarlas con una crema o pomada antibiótica. Después, remoja tus pies en té de menta. Esto reduce la sangre sin oxígeno bajo la uña. También puede intentar remojar las uñas de los pies en sal de epsom.
- Mantén la uña – No intentes arrancarte la uña del pie tú mismo. Confíe en nosotros. Si está colgando y causando problemas, tratar de cinta para arriba primero antes de llamar a su médico y tener que eliminar por un profesional. Si tienes que arrancarla tú mismo, córtala. Cuidadosamente.
- Cuida tu uña, incluso cuando no está ahí – Cuando tu uña se ha ido, necesitas usar un antifúngico tópico en el lugar donde la uña estaba antes. Cuando la nueva uña vuelva a crecer, intente utilizar un tampón – junto con cremas hidratantes – para adelgazar la nueva uña, ya que probablemente será más gruesa que la antigua.