Definición: Una opinión adversa es un informe emitido por un auditor que refleja un juicio negativo hacia un determinado estado financiero. En otras palabras, es un comentario escrito que refleja una preocupación sobre la exactitud de los datos financieros presentados.

¿Qué significa una opinión adversa?

Las opiniones adversas pueden ser emitidas por los auditores si, tras una revisión exhaustiva de la información financiera de una organización, existen pruebas suficientes para cuestionar la precisión de dicha información. Normalmente se hacen constar en un informe escrito que precede a los estados financieros y constituyen una señal de advertencia para las personas encargadas de revisar los documentos. Desde el punto de vista empresarial, una opinión adversa es un resultado de auditoría indeseable.

Una empresa que recibe un informe de este tipo podría enfrentarse a una investigación en profundidad por parte de sus accionistas o incluso de las autoridades fiscales. Además, desde la perspectiva de un inversor, una empresa con datos financieros inexactos no puede ser analizada adecuadamente; por lo tanto, una inversión potencial podría ser retenida hasta que se resuelva el problema. Estos informes suelen ser redactados por contables públicos, ya sea como profesionales autónomos o como empresa de contabilidad. El informe debe revelar con detalle las razones por las que se emite esta opinión.

Ejemplo

Book Publishing Co. es una empresa que publica y promueve libros de ciencia ficción. Los analistas financieros han estado diciendo que esta empresa tuvo un gran año ya que algunos de sus libros se convirtieron en los más vendidos de Estados Unidos. Recientemente la empresa emitió su informe anual de 2016 y parece que sus auditores dieron una opinión adversa a la empresa. Según el informe del auditor, la empresa ha estado registrando los pedidos de compra de los clientes como ingresos, antes de la emisión de la factura. Estos pedidos, según los auditores, no son más que compromisos comerciales que aún no se han cumplido, ya que la empresa no tiene suficientes inventarios para hacer frente a todos estos pedidos en este momento.

Esta práctica contradice algunos principios contables importantes y los auditores concluyeron que las ventas estaban sobrevaloradas al menos en un 30%. Este informe afectó negativamente a las acciones de la empresa en la Bolsa de Nueva York y el director general aún no se ha pronunciado sobre el asunto.