Resumen del tema
¿Qué son los cambios fibroquísticos en los senos?
Muchas mujeres tienen senos que se sienten abultados, gruesos y sensibles, especialmente justo antes de sus períodos. Estos síntomas se denominan cambios mamarios fibroquísticos. También pueden denominarse cambios mamarios cíclicos, porque aparecen y desaparecen con el ciclo menstrual.
Los cambios mamarios fibroquísticos son normales e inofensivos. No son cancerosos y no aumentan la probabilidad de padecer cáncer de mama.
Pero tener cambios fibroquísticos en las mamas puede dificultar la detección de un bulto que podría ser canceroso. Esto es especialmente preocupante si usted también tiene un riesgo más alto de lo normal de padecer cáncer de mama. Por lo tanto, si usted o un familiar cercano ha tenido cáncer de mama o si se ha sometido a un tratamiento de radiación o a una biopsia de mama que ha mostrado una hiperplasia ductal atípica (HDA), hable con su médico sobre la frecuencia con la que necesita una revisión de las mamas.
¿Qué causa los cambios fibroquísticos en las mamas?
Los expertos creen que los cambios fibroquísticos en las mamas están relacionados con los cambios hormonales que se producen durante el ciclo menstrual de la mujer. Cada mes, el cuerpo de la mujer se prepara para un posible embarazo. Libera hormonas que indican a los pechos que deben producir leche. Las glándulas lácteas (o mamarias) aumentan de tamaño, lo que puede hacer que algunas mujeres sientan los pechos abultados y sensibles. Estos síntomas desaparecen después de que la mujer empiece a menstruar.
Es más probable que tenga senos fibroquísticos si su madre o sus hermanas los tienen.
¿Cuáles son los síntomas?
Si tiene senos fibroquísticos, puede notar los síntomas justo antes de su período menstrual. Puede encontrar que:
- Sus senos están hinchados.
- Se sienten sensibles o dolorosos. Las mujeres a menudo lo describen como un dolor sordo o punzante, pesadez o dolor.
- Sus senos se sienten abultados. Su médico puede llamar a esto «abultamiento generalizado de las mamas». Las zonas abultadas (quísticas) se sienten gruesas. Puede tener uno o más bultos que están siempre en la misma zona y que crecen y se reducen con cada ciclo menstrual. Los bultos se mueven si se presiona sobre ellos.
- Los síntomas mejoran cuando finaliza la menstruación.
Los síntomas pueden estar en uno o en ambos lados y pueden aparecer hacia arriba y debajo de la axila.
Muchas mujeres notan por primera vez los cambios en las mamas fibroquísticas cuando tienen 30 años. A esta edad, sus niveles hormonales empiezan a variar más que antes.
¿Cómo se diagnostican los cambios fibroquísticos en las mamas?
Si nota un nuevo bulto en las mamas, espere un ciclo menstrual. Si sigue ahí después de la menstruación, acuda a su médico para que le examine las mamas. Si no tiene periodos menstruales, acuda a su médico para que le examine las mamas tan pronto como note un nuevo bulto.
Para diagnosticar los cambios fibroquísticos en las mamas, su médico le hará un examen de las mamas y le preguntará cuándo tuvo su último periodo. Por lo general, no se necesitan más exámenes ni pruebas. Pero si su médico necesita más información o usted quiere estar segura, es posible que le hagan otras pruebas, como una mamografía o una ecografía de las mamas.
¿Cómo se tratan?
No es necesario hacer nada con respecto a los cambios fibroquísticos de las mamas. Son normales y no provocan cáncer.
Si le molesta el dolor de mamas:
- Tome un analgésico de venta libre como el paracetamol (como Tylenol) o el ibuprofeno (como Advil). Si esto no le ayuda, pregunte a su médico sobre el uso de una crema cutánea con antiinflamatorios no esteroideos (AINE). Existen medicamentos más potentes, pero pueden tener más efectos secundarios. No te preocupes por los medicamentos. Lea y siga todas las instrucciones de la etiqueta.
- Use un sujetador que le proporcione un buen soporte a sus pechos.
- Pregunte a su médico sobre las píldoras anticonceptivas de baja dosis. Para algunas mujeres, éstas ayudan a reducir el dolor y la hinchazón de los pechos antes de la menstruación. Pueden ser una buena opción si le molestan los síntomas y quiere evitar el embarazo.
Aunque no hay pruebas de que ninguna de ellas ayude a aliviar el dolor de mamas, algunas mujeres afirman sentirse mejor cuando dejan la cafeína; siguen una dieta muy baja en grasas; o toman ciertos suplementos vitamínicos, minerales o de hierbas. Asegúrate de que tu médico está al corriente de los suplementos que tomas. Y hable con su médico antes de hacer cualquier cambio importante en su dieta.