Los terrarios de tarro de masón son un gran regalo para los profesores, como regalos para la casa o para llevar a un amigo enfermo. Se alimentan de la negligencia, por lo que incluso un decidido asesino en serie de plantas puede mantener uno de estos con vida. Estos terrarios son baratos y, dependiendo de las plantas, pueden durar años. Se tarda menos de 30 minutos en hacerlos.
Hacer un terrario en un tarro de albañil es fácil, pero requiere un poco de delicadeza porque estás trabajando en un área de plantación muy pequeña. Aunque puedes hacer un terrario estándar plantándolos boca arriba, el aspecto de los tarros al revés es muy atractivo. Para ello, utiliza la tapa para tu maceta.
Qué necesitas
- Tarros de albañilería (o cualquier otro tarro con tapa de rosca)con tapa de rosca)
- Pequeñas plantas
- Musgo (opcional)
Cómo hacer
-
Limpia y seca tu tarro
Si usas limpiacristales o un jabón fuerte, asegúrese de lavar el tarro después y dejar que se airee completamente. A continuación, coja la tapa de su tarro y póngala sobre una superficie plana, asegurándose de que el disco central esté bien colocado en la tapa.
-
Humedezca la tierra
Humedezca el medio de cultivo de su planta y luego retire su maceta o celda, asegurándose de no sacarla por la parte superior. Si está en una maceta, golpee la maceta y deslice la planta hacia fuera apretando suavemente los lados e inclinándola hacia su mano. Si la planta está en un paquete de celdas, aprieta la parte inferior y empuja la planta hacia fuera. Si la planta está atada a la raíz, desbaste las raíces frotándolas o rasgándolas en la parte inferior
-
Coloque la planta
Aprete el cepellón y luego coloque la planta en la tapa del frasco. Es conveniente que el cepellón esté compacto y, si es posible, que todas las raíces estén cubiertas de tierra. Presione el cepellón dentro de la tapa para que quede en forma de montículo, pero sin que se desborde.
-
Añade el musgo
Para dar al terrario un aspecto acabado, coge pequeños trozos de musgo y presiónalos sobre la tierra alrededor de la planta, creando un bonito montículo verde. Mantén el musgo alejado de la copa de la planta.
-
Prueba de ajuste del frasco
Acorrala cuidadosamente las hojas y ramas de tu planta para que entren en el frasco, teniendo cuidado de empujar las hojas y ramas hacia arriba. Coloque suavemente el frasco sobre la planta, utilizando los dedos para empujar la vegetación dentro del frasco. Girar el frasco puede ayudar. Si es posible, sigue girando el tarro hasta que las roscas de la tapa se enganchen. Esto es un poco complicado e incluso si no puedes hacer que las roscas se enganchen, puedes apoyar el labio del tarro en la tapa y crear un sello. Sólo tenga cuidado de recordar esto cuando mueva el tarro y recójalo por la tapa y el cristal.
-
Cuidado de su terrario
Manténgalo alejado de la luz solar directa, pero intente darle una luz indirecta brillante. Es posible que no tengas que regarlo durante meses, aunque debes comprobar que la tierra está húmeda, no mojada, cada dos semanas. Si ves mucha condensación en el frasco, déjalo abierto durante unas horas para secar un poco la tierra.
Para este terrario se utilizaron suculentas, pero puedes usar cualquier planta pequeña que te sirva. Haz clic aquí para ver una lista de grandes plantas para terrarios. Para añadir un toque caprichoso o decorativo a su terrario, coloque piedras, conchas, estatuillas en miniatura o cualquier otra cosa que sobreviva a la atmósfera húmeda de un terrario. Haz terrarios de «recuerdos» coleccionando y añadiendo recuerdos de las vacaciones, y crea un terrario con ellos como tema. Para regalarlo, simplemente ata una cinta o un trozo de rafia alrededor de la tapa del tarro.