Por Adam Debrowski

Hay tres tipos principales de conjuntivitis:

  • Conjuntivitis vírica

  • Conjuntivitis bacteriana

  • Conjuntivitis alérgica

También existen numerosas formas menos comunes de conjuntivitis, entre ellas:

  • Conjuntivitis papilar gigante

  • Conjuntivitis neonatal

  • Conjuntivitis química

Muchos tipos de conjuntivitis comparten síntomas con otros tipos de conjuntivitis. Sin embargo, cada uno de ellos tiene sus propias causas, factores de riesgo y tratamientos.

Conjuntivitis vírica

Este es el tipo más común de conjuntivitis, y al que los médicos suelen referirse cuando utilizan el término «conjuntivitis».

Debido a que la conjuntivitis vírica está causada por un virus, normalmente un adenovirus, es extremadamente contagiosa. Puede contraerse cuando las gotitas respiratorias se transfieren al ojo (al estornudar o toser) o al tocarse el ojo antes de lavarse las manos. También puede acompañar a un resfriado, una gripe u otra infección de las vías respiratorias superiores.

La conjuntivitis viral suele empezar en un ojo (unilateral) antes de acabar infectando ambos (bilateral). Los signos más comunes son el picor y el enrojecimiento de los ojos con una secreción clara y acuosa.

La afección suele desaparecer por sí sola al cabo de poco tiempo, pero a menudo se recetan o aconsejan gotas medicinales para la conjuntivitis. Los colirios antibióticos no son eficaces contra los virus que causan la conjuntivitis vírica, pero pueden utilizarse otros fármacos para aliviar los síntomas.

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Conjuntivitis bacteriana

Otra afección común, la conjuntivitis bacteriana, está causada por bacterias y también es muy contagiosa.

A diferencia de la secreción acuosa de la conjuntivitis vírica, la conjuntivitis bacteriana produce una secreción espesa de color blanco, amarillo o verde del ojo o los ojos afectados.

La conjuntivitis causada por bacterias suele desaparecer por sí sola en un plazo de una a dos semanas, pero puede necesitar gotas oculares antibióticas si la afección empeora. Los remedios antibióticos para la conjuntivitis suelen recomendarse si:

  • La infección es grave

  • El paciente tiene un sistema inmunitario debilitado

  • La infección no empieza a desaparecer por sí sola en el plazo de una semana

Las enfermedades de transmisión sexual como la gonorrea y la clamidia (conjuntivitis gonocócica y clamidial) también pueden causar conjuntivitis bacteriana, pero esto es mucho menos común.

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Conjuntivitis alérgica

Las alergias oculares pueden provocar una reacción común y no contagiosa llamada conjuntivitis alérgica. Puede ser provocada por alérgenos como el polen, la caspa de los animales y los ácaros del polvo.

Los síntomas más destacados de la conjuntivitis alérgica son el picor y el enrojecimiento de los ojos. Estos síntomas pueden aliviarse con gotas o pastillas antihistamínicas que controlan las reacciones alérgicas.

La afección puede ser estacional o durar todo el año, dependiendo de las alergias individuales. Cuando sea posible, evitar el alérgeno en cuestión es un factor importante para prevenir o deshacerse de la conjuntivitis alérgica.

Conjuntivitis papilar gigante

Este tipo de conjuntivitis afecta más comúnmente a las personas que usan lentes de contacto blandas. Puede causar intolerancia a las lentes de contacto, picor, secreción abundante, lagrimeo y protuberancias rojas en la parte inferior de los párpados.

Por lo general, afecta a ambos ojos.

A las personas afectadas por la conjuntivitis papilar gigante se les pedirá que dejen de usar las lentes de contacto durante un tiempo. El oftalmólogo puede recomendar el cambio a otro tipo de lentes de contacto para reducir la posibilidad de que la conjuntivitis vuelva a aparecer.

Conjuntivitis neonatal

A veces, los ojos de los recién nacidos se irritan debido a la inflamación o a la obstrucción de los conductos lagrimales. Esto se denomina conjuntivitis neonatal.

Los recién nacidos también pueden estar expuestos a enfermedades de transmisión sexual cuando pasan por el canal de parto de una madre con una infección activa. Estas infecciones pueden transmitirse al recién nacido con una forma única de conjuntivitis neonatal.

La conjuntivitis gonocócica, derivada de la bacteria de la gonorrea, es una de estas infecciones. Con un tratamiento moderno, a menudo puede evitarse administrando un medicamento inmediatamente después del nacimiento.

Si está embarazada y puede tener una enfermedad de transmisión sexual, un médico le recomendará que se haga un chequeo y se trate antes del nacimiento de su bebé.

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Ojo rosado químico (Conjuntivitis tóxica)

Las sustancias químicas de los objetos a los que estamos expuestos pueden causar a veces un tipo único de conjuntivitis.

Los irritantes leves pueden incluir el humo del cigarrillo, los gases de escape del diésel, los perfumes y ciertos colirios, junto con otras sustancias químicas. Los síntomas de la conjuntivitis química, a veces llamada conjuntivitis tóxica, incluyen dolor, enrojecimiento de los ojos, cambios en la visión e hinchazón significativa alrededor de los ojos.

Las sustancias químicas o irritantes más graves pueden requerir tratamiento inmediato. Si cree que tiene conjuntivitis química, póngase en contacto con un profesional médico lo antes posible.

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Tratamiento de la conjuntivitis

Aunque no todos los tipos de conjuntivitis requieren tratamiento, algunos pueden convertirse en afecciones más graves sin él.

Un oftalmólogo podrá diagnosticar correctamente su tipo de conjuntivitis y proporcionarle el tratamiento necesario.

Página actualizada en febrero de 2021

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