Todos hemos oído que el E-coli y la Salmonella contaminan nuestros alimentos, pero nunca nos hemos preocupado demasiado por saber qué son realmente. ¿Son lo mismo o tienen algo en común? Averigüémoslo:
La Salmonella y la E.coli son iguales en el sentido de que ambas son bacterias, pero en realidad son tipos de bacterias completamente diferentes. Salmonella es el nombre del grupo de más de 2.500 tipos de bacterias que más comúnmente causan intoxicación alimentaria en humanos y animales. La salmonela se propaga al ingerir alimentos contaminados por la salmonela, como huevos crudos, carne cruda, huevos, frutas, verduras y agua contaminada. La contaminación tiene lugar cuando estos alimentos entran en contacto con heces de animales o humanos y no se cocinan adecuadamente. Los síntomas de la salmonelosis son diarrea, vómitos, fiebre, calambres y dolor de cabeza, y duran entre 4 y 7 días. Los síntomas pueden ser más graves en los bebés y los ancianos, pero acaban desapareciendo por sí solos. Si los síntomas persisten durante más de 3 días y no mejoran, si la fiebre supera los 38 grados centígrados, si las heces tienen sangre o si hay signos de deshidratación, se debe solicitar asistencia médica profesional.
E-coli es el nombre de la bacteria que vive en los intestinos sin causar (la mayoría de las veces) ningún problema. Sin embargo, varias cepas de E-coli pueden provocar una intoxicación alimentaria y dar lugar a problemas graves en los que se producen sangrados y hemorragias. Se puede contraer el E-coli al comer alimentos que han sido procesados o cosechados incorrectamente y que pueden haber estado en contacto con heces de animales o humanos. Otras causas son el agua contaminada y el contacto de persona a persona. El agua contaminada incluye el agua de pozo privado no tratada, el agua de piscina no mantenida adecuadamente, etc. El contacto personal también es otra fuente de transmisión de E. coli, principalmente por no lavarse las manos después de tocar superficies contaminadas. Lo más común es que la E. coli se reconozca por aquellos que tienen síntomas que implican heces con sangre, en cuyo caso estas personas deben ser llevadas a la atención hospitalaria inmediata.
Los brotes de salmonela y E. coli tienen su origen en la contaminación de las heces, pero son bacterias diferentes que plantean riesgos diferentes. Ahora que se ha informado sobre las diferencias, lo más importante es mantenerse sano y libre de estas bacterias.
Cómo protegerse
La mejor manera de evitar cualquier infección por E-coli y Salmonella es mantener la higiene. Lave siempre a fondo sus verduras y frutas, ya que pueden haber estado en contacto con la suciedad que puede haber sido contaminada por las heces. De hecho, el E-coli y la Salmonella pueden transmitirse con un simple apretón de manos de alguien que no se haya lavado las manos después de defecar. Por lo tanto, lávese siempre las manos antes de comer.
En segundo lugar, siempre es importante cocinar bien la carne, especialmente el pollo. A los que les gusta que la carne esté bien hecha, corren el riesgo de contraer una de estas infecciones. Por último, es importante mantener el agua potable en su hogar para que su familia no consuma E-coli o Salmonella de su fuente de agua. ¡El agua embotellada o un sistema de agua potable purificada será su mejor apuesta para el agua segura!
Lea a continuación: Consejos para proteger su hogar de la E coli