La curcumina es el principal componente de la hierba cúrcuma y es uno de los suplementos para la salud más versátiles y ampliamente utilizados. Hay muchos estudios de alta calidad que confirman la mayoría de los beneficios, pero también hay que tener en cuenta algunas precauciones.
Resumiendo los beneficios
La curcumina es bien conocida terapéuticamente por su acción antiinflamatoria, ya que puede ayudar a reducir el dolor articular. En una revisión sistémica, se descubrió que la curcumina es un antiinflamatorio eficaz y seguro en seis ensayos con seres humanos1.
En otro estudio piloto con pacientes que padecían artritis reumatoide, los resultados revelaron que los pacientes que tomaban curcumina presentaban una mejora significativa con respecto a los que tomaban diclofenaco sódico2.
En personas con osteoartritis se demostró que los niveles de proteína C-reactiva (PCR), el marcador inflamatorio, disminuían mientras se tomaba curcumina durante un periodo de tres meses3.
Parte de su acción antiinflamatoria también puede ser responsable de su capacidad para mejorar la salud del corazón, ya que los estudios han demostrado que es útil para algunas afecciones cardíacas, incluida la artrosclerosis4.
Aunque algunas personas creen que podría mejorar la pérdida de memoria en pacientes con Alzheimer, hasta ahora las pruebas no lo confirman5.
Precauciones importantes
Algunos estudios han descubierto que la curcumina puede causar efectos secundarios gastrointestinales como diarrea y náuseas7. Estos efectos secundarios eran dependientes de la dosis y, por lo tanto, reducir la dosis puede ser suficiente para reducir los efectos estomacales adversos.
La cúrcuma tiene propiedades anticoagulantes y muchos productos farmacéuticos tienen la misma acción, como la aspirina y la warfarina, por lo que no es aconsejable utilizar la curcumina si se toma medicación anticoagulante o antiagregante plaquetaria.
La curcumina también reduce los niveles de glucosa en la sangre, por lo que si tiene diabetes y toma medicación, la curcumina puede hacer que el nivel de azúcar en la sangre descienda aún más, lo que provocaría una hipoglucemia.
También puede ser estimulante para la vesícula biliar, haciendo que el cuerpo produzca más bilis, por lo que si tiene cálculos biliares es mejor evitarla.
En general, la mayoría de los estudios han encontrado que la curcumina es segura en dosis inferiores a 8000 mg al día6. Como pauta general, 2000 mg al día deberían ser suficientes para tener un efecto terapéutico7. Como siempre, trabaje con la orientación del médico o profesional de la salud.
- Chainani-Wu N. Safety and anti-inflammatory activity of curcumin: a component of turmeric (Curcuma longa). J Altern Complement Med 2003;9 (1): 161-8
2. Chandran B, Goel A. A randomised, pilot study to assess the efficacy and safety of curcumin in patients with active rheumatoid arthritis. Phytother Res 2012;26(11):1719-25.
3. Belcaro G, Cesarone MR, Dugall M, Pellegrini L, Ledda A, Grossi MG, et al. Registro de evaluación de producto de Meriva, un complejo de curcumina-fosfatidilina, para el tratamiento complementario de la artrosis. Panminerva Med. 2010.
4. Wongcharoen W, Phrommintikul A. The protective role of curcumin in cardiovascular diseases. Int J Cardiol 2009;133(2):145-51.
5. Ringman JM CG, Tend E, et al. Curcumina oral para el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer de leve a moderada: Tolerabilidad y resultados de eficacia clínica y de biomarcadores de un estudio controlado con placebo de 24 semanas. Oral curcumin for the treatment of mild-to-moderate Alzheimer’s disease: Tolerabilidad y resultados de eficacia clínica y de biomarcadores de un estudio de 24 semanas controlado con placebo. Actas del Resumen de la Conferencia Internacional sobre la Enfermedad de Alzheimer USA 2008.
6. Aggarwal BB, Harikumar KB. Potenciales efectos terapéuticos de la curcumina, el agente antiinflamatorio, contra las enfermedades neurodegenerativas, cardiovasculares, pulmonares, metabólicas, autoinmunes y neoplásicas. Int J Biochem Cell Biol 2009;41(1):40-59.
7. Gupta SC, Patchva S, Aggarwal BB. Funciones terapéuticas de la curcumina; lecciones aprendidas de los ensayos clínicos. AAPS J 2013;15(1):195-218.